¿Cómo hacemos que la gente quiera volver al trabajo, deben volver?

 

Vivimos tiempos extraños, éstos nos han encontrado como dice la canción de The Doors. Por razones que todos ya sabemos en el 2020 nos encerramos, instalamos Teams, Zoom o cualquier otra app para comunicarnos y continuamos con nuestro trabajo sin mirar atrás.

 

 

En el pasado quedaron los tacos para ir a la oficina, los viajes para reuniones de media hora. Atrás quedaron los formatos impresos, los puestos de trabajo abarrotados de gente, atrás quedaron las excusas para implementar sistemas de trabajo remoto por que no era seguro o el servidor no lo permitía.

 

Atrás quedó la concepción de que el trabajo se compone de las actividades que hacemos en la oficina de lunes a viernes de 8am a 5pm y que sólo se realizan en las instalaciones físicas de la empresa.

Fue así como en el año 2021 nos enfocamos en continuar con el trabajo usando las herramientas que teníamos a la mano y vimos como las oficinas se cerraban en todo el mundo. Ejemplos de ciudades tan importantes como NY o Londres nos llevaban a pensar que esta tendencia no iba a cambiar.

 

Cada día que pasaba hacíamos de nuestra oficina en casa un poco mejor: trajimos una silla mas cómoda, compramos plantas, una máquina de hacer café. Empezamos a programar reuniones virtuales y el día menos pensado ya nuestra rutina había cambiado completamente, habíamos llegado a la era del home-office.

 

Vimos como esta nueva modalidad de trabajo significó un aumento del 5% en la productividad ocasionado solamente por los ahorros en desplazamiento. Esto sumado a otros beneficios para el trabajador como son:

  • Ahorro en costos de desplazamiento
  • Ahorro en costos por comer en la calle
  •  Menos gastos en ropa
  • Mas tiempo para disfrutar

 

Todo parecía que iba bien, sin embargo a finales del 2021 empezaron los problemas, se hizo cada vez más evidente el efecto “Burnout” o agotamiento que traía consigo el trabajo en casa. Fue así como muchas personas vieron como su rutina de trabajo se extendía y se fusionaba con su día a día en casa, y esto significó que las personas empezaron a trabajar hasta 8 horas extra por semana sin darse cuenta.

 

 Sumado a esto, se evidenció un efecto de sobre-comunicación en el cual pretendimos compensar la presencialidad con reuniones virtuales, las cuales pasaron el promedio de 60 a 30 minutos. El aumento en el número de interacciones creó más  tareas, listas y mas correos.  

Un análisis al respecto nos lo ofrece Gillian Tett, autora del libro Anthro-Vision, quien gracias a su enfoque antropológico nos ayuda a entender un poco mejor qué fue eso que perdimos cuando comenzamos esta nueva forma de trabajo en casa.

  

Gillian hizo una investigación enfocándose en las interacciones y rituales que teníamos en el mundo laboral Pre-Covid. Para esto analizó equipos de trading ubicados en Europa y EEUU.  ¿De qué se dio cuenta? Los equipos que habían trabajado de manera presencial tuvieron mejores resultados que los que lo hicieron de forma virtual. 

 

Más de la mitad de las personas que trabajaban allí dijeron que las reuniones presenciales les parecían mas productivas que las virtuales. Al parecer esta situación se da pues en el trabajo presencial se comparte más información incidental, lo cual es más importante de lo que parece. 



En el transcurso de este 2022, ya con las restricciones prácticamente desaparecidas vimos cómo muchas empresas reabrieron sus sedes y empezaron a traer nuevamente a los trabajadores a sus lugares de trabajo, pero algo había pasado. Ya no éramos los mismos y no queríamos volver a la oficina como la conocíamos

 

Gracias a Microsoft ya tenemos un poco de información que ha sido compartía recientemente:

 

2/3 de las personas quieren trabajar de forma flexible y en promedio las personas quieren trabajar en la oficina 2,5 días a la semana. Esto se esta evidenciando cada vez mas en la medida que las personas están renunciando al trabajo como nunca antes visto

 

Pero antes de sacar conclusiones preguntémonos:

 

 

Porque es tan importante la presencialidad?  La respuesta la tiene la Curva de Allen:

Mediante este estudio se evidenció cómo las personas que comparten un lugar de trabajo físico resuelven sus proyectos un 32% mas rápido que los que lo  hacen de forma virtual.

 

Como lo explica Jony Ive (exdiseñador líder de apple) el peligro de la comunicación digital es que nos hace creer que puede reemplazar la presencialidad.

 

 

Esto nos lo explica de otra manera el libro Culture Code  cuando nos dice que “The key finding was that interaction is more important than individual skills. Entonces queda claro que la presencialidad es vital ya que la interacción física es necesaria si queremos no demorarnos el triple y tener personas y equipos motivados y comprometidos.

ponga el video en el 2.30 para ver la partesita 🙂

Sin embargo no  se trata de obligar a las personas a volver a las oficinas. No olvidemos que en las empresas estamos competiendo siempre por el talento y nuestro objetivo debería ser potencializar y atraer a los mejores para ser una empresa de alto rendimiento.

 

 

En lugar de obligar, pensemos por qué las personas no quieren volver a la oficina. ¿Qué nos pasó?

 

Aquí creo que la respuesta es muy sencilla, la comodidad nos ha vuelto perezosos. Esto no es algo malo, simplemente es el instinto de conservación de energía que tenemos todos los seres vivos. En pandemia adecuamos nuestras casas para poder trabajar allí, encontrando un sinnúmero de beneficios de corto plazo (“no me tengo que mover, manejo mi tiempo, no me interrumpen”)


Al respecto recientemente un exitoso desarrollador de oficinas en NY, Stephane Theuriau nos cuenta que ya no se trata de “parquear” un gran numero de personas en lugar con un computador pegado a un cable.

 

Entonces según esto lo que tenemos que hacer es:

 

  1. Entender que los espacios físicos son para trabajo colaborativo y buscar fortalecer las relaciones personales del equipo entre ellos y que estén alineados con el propósito de la empresa.
  2. Si los espacios de trabajo (no es solo la mesa y silla; es el baño, la cocina, cercanía a la casa) no son mas chéveres que la casa, la gente difícilmente va a preferirlos sobre la comodidad de Teams en la casa.
  3.  Plantear horarios flexibles que le permitan a las personas ahorrar tiempo al no desplazarse en horarios pico.

 

 


Juzgar por medio de analogías es peligroso pues puede ser engañoso en muchos casos, sin embargo creo que esta analogía vale la pena 😉: 

En el 2019 construimos con unos amigos un espacio de coworking ubicado en el barrio Perpetuo Socorro.

En el 2023 nos mudamos a otro coworking ubicado en Manila, el Openspace.

 

En el 2024 el Openspace cerró sus puertas tomamos la virtualidad 100%. Los tiempos cambian muy rápido😯


Gracias por haber llegado al final de este articulo 🥸, todos los comentarios son bienvenidos, me pueden escribir a sebas@dimetrica.com

 

 

Sebastian del Corral R.

 

25 de Marzo de 2022-Actualizado Mayo 2024